lunes, 1 de julio de 2013

Museo Nacional de Arte de Catalunya

El Museo Nacional de Arte de Cataluña se encuentra en lo que anteriormente era un castillo. Este edificio fu completamente restaurado, y esta localizado en el palacio nacional en la montaña de Montjuïc.


La vista desde el lugar es espectacular, desde allí se divisa prácticamente toda la ciudad de Barcelona. La plaza que se configura frente a la hilera de cuatro columnas, se usa frecuente para todo tipo de eventos culturales. Cuando la visitamos, tenía lugar un concierto de musica electrónica.










Este palacio es de estilo clasicista, fue hecho con este estilo con la idea de evocar la arquitectura clásica española. Sus espacios interiores son amplios y cuenta con dos plantas, en la primera se encuentra la exposición de arte románico y gótico, y en la segunda planta se localiza la de arte moderno y numismática. 



Esta colección de arte romana es una de las mas completa del mundo. Conserva una colección de capiteles tallados a mano. Entre ellos se destacan aquellos que cuentan historias y pasajes bíblicos como el que se ve en la foto de la izquierda, que narra de forma gráfica el relato del pecado original.

En la parte posterior del palacio, se  encuentra un coliseo, alrededor del cual  se desarrollan diversas actividades culturales. Hay algunos computadores que permiten un aprendizaje interactivo para los visitantes.
En el segundo piso, las columnas sostienen una cúpula muy imponente, con frescos plasmados en ella. Las ventanas en ella y las que generan los arcos que la sostiene,  permiten una amplia entrada de luz.




En la sala de arte contemporáneo, esta pintura particularmente me impresiono. Tiene un punctum muy fuerte debido al contexto histórico en el que fue desarrollado. Estaba en plena construcción la Sagrada Familia, y muchas familias pobres, se localizaban a su alrededor, ya fuera por que era su sitio de trabajo, o por que era el lugar donde mendigaban. La mirada del joven es particularmente punzante, transmite toda la tristeza y desesperanza común en muchas familias de la época.













Estas pinturas son tan realistas, que son capaces de transmitir sensaciones. En el cuadro de la izquierda, el niño tiene una mirada algo triste y pálida, mientras que en la de la derecha, se puede percibir el calor de un verano intenso.



Me causo mucha curiosidad encontrare con estas tres obras, que muestran el gesto de una mujer dando un grito. A pesar de ser distintas técnicas, se entiende lo que el artista quería transmitir.


Esta escultura en particular, es muy diciente. Aunque el artista en la escena solo nos presenta a una mujer, la observación detallada de los diferentes elementos que presenta, nos permite armarnos un cuadro completo de las circunstancias que rodean a esta mujer.

                    
Las esculturas muestra un exhaustivo trabajo de estudio y observación del cuerpo humano por parte del artista. Las que abarcan el cuerpo completo requieren una profunda comprensión del funcionamiento de los músculos y huesos del cuerpo.


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